💭 ¿Alguna vez te has preguntado cómo sabe tu robot por dónde ir?

Parece magia: lo enciendes, da un par de vueltas, evita muebles, reconoce paredes y vuelve a su base sin perderse.
Pero detrás de ese movimiento “inteligente” hay una red de sensores y algoritmos que trabajan en tiempo real.

En nuestro taller hemos reparado cientos de robots aspiradores, y una cosa está clara:
👉 los sensores son el corazón del robot.
Sin ellos, un Roomba o Cecotec no sería más que una aspiradora con ruedas.

Hoy te explicamos, de forma sencilla, cómo funcionan los sensores que hacen posible que tu aspirador robot piense, se oriente y limpie por sí mismo.

🧭 1. Sensores de navegación: los “ojos” del robot

Estos sensores permiten que el aspirador sepa dónde está y cómo moverse por el espacio.
Según el modelo, puede usar distintos tipos:

🔹 Infrarrojos y ultrasónicos

Emiten señales que rebotan contra los objetos y vuelven al robot, ayudándole a detectar obstáculos y calcular distancias.
Así evita chocar con muebles, paredes o patas de sillas.

🔹 Cámara o sensor óptico (visión artificial)

Los modelos más avanzados, como los Roomba con tecnología iAdapt o los Cecotec Conga 4000, usan cámaras superiores para mapear la habitación.
Gracias a ellas, pueden crear un plano digital y recordar por dónde ya han pasado.

🔹 LIDAR (láser)

Algunos modelos de gama alta utilizan LIDAR, una tecnología que emite un rayo láser giratorio para medir con precisión milimétrica todo el entorno.
Es el mismo principio que usan los coches autónomos.
Resultado: limpieza más eficiente, trayectorias exactas y cero choques.

2. Sensores de suciedad: los “oídos” que detectan polvo

Sí, los robots también “escuchan” la suciedad.
Estos sensores detectan las vibraciones o el aumento de partículas de polvo que pasan por el conducto de aspirado.

Cuando el robot nota más suciedad en una zona, intensifica el cepillado y la succión automáticamente.
Por eso verás que, a veces, tu Roomba da varias pasadas por el mismo lugar: ha detectado que el suelo todavía no está limpio.

🧱 3. Sensores de colisión: los “reflejos” del robot

Los robots aspiradores cuentan con un parachoques móvil en la parte delantera.
Cada vez que choca suavemente con un objeto, el sensor de impacto lo detecta y el robot cambia de dirección.

En modelos más avanzados, estos golpes apenas ocurren, porque los sensores de infrarrojos o cámara anticipan el obstáculo antes de tocarlo.

⚫ 4. Sensores de vacío o de “precipicio”: los guardianes del abismo

Estos son los que evitan que tu robot se caiga por las escaleras o desniveles.
Emiten señales hacia el suelo y, si no reciben rebote (porque hay un hueco), detienen las ruedas inmediatamente.

Es una de las funciones más importantes para la seguridad del robot… y también una de las que más fallan cuando los sensores están sucios.
En nuestro taller, los Roombas “suicidas” que se tiran por los escalones casi siempre tienen sensores obstruidos por polvo.

🧩 5. Sensores de batería y base: los encargados de “volver a casa”

Cuando la batería baja, el robot utiliza sus sensores de proximidad para localizar la señal de la base de carga.
Algunos modelos, como los Roomba i7 o los Conga 7090, pueden incluso reconocer el entorno visualmente y regresar a su base siguiendo el mapa digital.

Si alguna vez tu robot no encuentra la base, probablemente el emisor de señal de la base esté sucio o mal alineado.

⚙️ Cuando los sensores fallan: los síntomas más comunes

En nuestro taller vemos fallos de sensores todos los días.
Estos son los signos más habituales de que algo no va bien:

• El robot gira sin parar o se mueve en círculos.
• Se cae por las escaleras o no detecta desniveles.
• Choca continuamente con muebles.
• No regresa a la base o se pierde en casa.
• Pierde potencia o “se apaga solo”.

En la mayoría de los casos, una limpieza de sensores o un recalibrado de software soluciona el problema sin necesidad de cambiar piezas.

En CD MANTENIMIENTO, llevamos años reparando y ajustando robots aspiradores de marcas como Roomba, Cecotec y Dyson.
Sabemos que, detrás de cada fallo, hay un pequeño sensor que necesita atención.

🔧 Reparamos, limpiamos y calibramos los sistemas de navegación y detección,
💡 y además ofrecemos recambios originales y compatibles para mantener tu robot funcionando al 100 %.

📍 Si notas que tu aspirador “se ha vuelto loco”, tráelo a revisión: a veces solo necesita ver (y oír) bien otra vez.

💡 En resumen

Los sensores son los verdaderos ojos, oídos y reflejos del aspirador robot.
Gracias a ellos, tu Roomba o Cecotec puede moverse de forma autónoma, evitar obstáculos, limpiar eficientemente y regresar a su base.
Y cuando fallan, basta con una buena puesta a punto para que vuelva a comportarse como el ayudante inteligente que es.